Tras 10 años desde su última visita, la banda estadounidense se presentó en Chile ante un Movistar Arena que agotó todas sus localidades.
Un show esperado por años. Y es que son miles son fanáticos de Paramore en nuestro país, tanto así que en menos de una hora lograron el sold out de su show en el Movistar Arena. Y cómo no, si la agrupación llevaba una década sin visitar Chile y su público es fiel y organizado. O eso es lo que pudimos ver en el pasado concierto de anoche, donde éstos generaron diversos fan actions que no pasaron desapercibidos por la banda, que venía a presentar su último trabajo discográfico “This is why” (2023).
Para acortar la espera, se agendaron dos shows previos a Paramore, iniciando con la banda de rock nacional Temple Agents, quienes salieron a las 19:15 a escena y acompañaron a los fans que se encontraban en el lugar con un acotado setlist que incluyó canciones como “Roses”, “Evolving”, “Young Soul”, “Home” y “Divided”. Sin duda aprobaron, ya que los presentes saltaron y apoyaron a los nacionales en todo momento.
Tras una breve pausa, llegó el turno de la primera artista internacional. Quien ha acompañado a Paramore en toda su gira y, además, es pareja de Zac Farro, histórico baterista de la agrupación de rock alternativo: Elke, quien destacó por entregar un show cercano, llamando la atención por su extravagancia y simpatía, lo que claramente agradó a los presentes, quienes saltaban y coreaban sus canciones. Sin duda una gran previa para lo que se venía. Dentro de su setlist, destacaron canciones como “No Pain”, “Without the I” y, sobre todo un cover jazzero de “Mr Brightside”, original de The Killers. Un gran acierto el incluirla en la gira de Paramore.
Se acercaban las 21:00 horas y las personas ya se encontraban con la ansiedad a flor de piel, por lo que llamaban a la banda gritando “Paramore, Paramore” y jugando con las luces de sus teléfonos y linternas de colores moviéndolas de un lado a otro, subiéndolas y bajándolas hasta que finalmente la agrupación salió a las 21:15 horas al escenario entre la euforia de los miles de fans que repletaron el lugar. Finalmente había llegado el momento de ver a Paramore en vivo después de 10 años de su última visita.
Liderados por la carismática Hayley Williams, la banda mostró desde el minuto 1 una energía increíble en el escenario, comenzando su show con “You first” perteneciente justamente al álbum que los tiene girando: This is Why (2023). Todo había comenzado muy bien hasta que, una vez finalizado el primer tema, la pelirroja detuvo el concierto durante varios minutos porque en las primeras filas de cancha preferencial se registraron algunos desmayos y las personas estaban empujándose mucho. Es aquí cuando la vocalista pide que, por favor, todos nos cuidáramos para disfrutar de un buen espectáculo y retrocediéramos unos pasos para dar espacio a las personas de más adelante. Sin duda una acción que, a pesar de los minutos utilizados, se agradeció, puesto que demostró lo importante que son para ella y la banda sus fanáticos.
Una vez ya todo bajo control, se dio paso a dos regalonas del Brand New Eyes (2009): “Playing God” y “Decode” trajeron la nostalgia al Movistar Arena, sobre todo esta última, que nos recordó el estreno de la primera película de la saga Twilight. ¿Quién no quiso ser un vampiro en esa época gracias a esta gran banda sonora?
Luego sonó “Caugh in the middle”, “Running out of time” –una de las favoritas del último disco- y “Rose – colored boy”, esta última acompaña de un fan action que llamó mucho la atención: se organizaron y, desde diversas ubicaciones dentro del recinto, se lanzaron globos de color rosado que inundaron el Movistar Arena. Iba todo muy bien, pero Hayley nuevamente tuvo que detener el concierto en medio de la canción, ya que una vez más se presentaron algunos desmayos en las primeras filas. Una vez que todo volvió a calmarse, la interpretación se retomó donde había quedado.
“Ahora quiero intentar hacer algo que quizás es estúpido, pero puede que funcione. Quiero que todos estén quietos junto a mí durante la canción que viene”, dijo Williams para evitar más desmayos y cuidar a sus fans. Así se dio paso a “C’est comme ça” y ella no se movió durante toda la canción. Su gesto llamó mucho la atención ya que, durante todo el resto del show, estuvo bailando, saltando y recorriendo todo el escenario.
Así llegamos a otra de la banda sonora de Twilight: “I caught myself” y, posteriormente, una que Paramore había dejado de tocar durante muchos años, ya que está ligada a una antigua relación amorosa de Hayley quien, una vez que explicó esto, dijo que la música es la cosa más romántica que existe e interpretó “The only exception”, algo que todos agradecimos porque claro, es una de las canciones más icónicas de los estadounidenses. Este fue uno de los momentos más emotivos de la noche.
Así ya llegamos a “(One of those) crazy girls” que fue coreada por todo el Movistar al unísono y volvimos al último disco junto a “The News”, otra de las favoritas del This is why. Así retrocedimos a la época del Riot! (2007), uno de los álbumes más exitosos de Paramore con “That’s what you get” disfrutada, coreada y recibida por la ovación de un público que estuvo en su máximo de energía durante absolutamente todo el show.
Después de ese momento, Hayley presenta a Zac Farro, baterista histórico de la agrupación. Quien además tiene un proyecto musical llamado HalfNoise, del cual se extrajo para esta ocasión la canción “Scooby’s in the back”, donde hasta Williams apoyó en la percusión mientras el baterista se apoderó del micrófono.
En un espacio más íntimo durante la presentación, “Last Hope” fue interpretada a capela entre el público y Hayley, en una atmósfera que nos tenía a todos atónitos. Y es que el talento de la agrupación en vivo es increíble. No podemos dejar de mencionar también a Taylor York, guitarrista principal y actual pareja de la vocalista. Dato que hizo que, en más de una ocasión, el público gritara “El beso, el beso”.
Ya en la parte final del concierto, Paramore interpretó tres canciones ya regalonas: “Hard times”, “Ain’t fun” y “All I wanted”, que fue coreada con emoción, dejando en evidencia el gran potencial y la solidez del talento vocal de la pelirroja.
Tras esto, se retiraron del escenario entre los gritos de la gente que no paraba de llamarlos porque obvio, el show debía continuar. Así fue que, tan solo en un par de minutos, los estadounidenses volvieron para dar paso al encore.
“La música es la cosa más romántica que existe y aquí quedó demostrado con ustedes. Porque después de todo este tiempo, we still into you”, dijo la vocalista antes de pasar a aquella canción del disco Homónimo (2013), donde muchas personas sacaron sus smartphones para grabar el momento.
Ahora, otra de las que no se tocaron durante muchos años por la banda. Pero que es todo un clásico que, de verdad, agradecemos poder disfrutar en vivo: “Misery Business” y la locura fue total. No solo eso sino que, a la mitad de la canción, la agrupación hizo subir a dos fans para cantar la parte final de este ya, himno de la adolescencia. Apoyados por todo el recinto, Naya y Patricio fueron los afortunados fanáticos que pudieron cantar junto a su banda favorita esta canción en el escenario. Algo que difícilmente olvidarán en sus vidas.
Y llegó el momento final. “This is why”, canción que da el nombre al álbum que vienen promocionando en esta gira, es la encargada de cerrar con broche de oro una presentación sin puntos bajos, donde destacó la humildad, carisma y preocupación de una banda que demostró no solo ser sólida en vivo, sino que sus fans son muy importantes y eso lo agradecieron a montones. Esperamos volver a tenerlos en nuestro país, ya que la es algo que prometieron. ¡Estaremos muy expectantes esperando lo que se viene a futuro!
Fotos por: @estricolor – María Loreto Plaza