Hablar de Mercyful Fate es remontarnos de lleno en la época metalera clásica de los 80’s; y es que para la fanaticada chilena, la larga espera de 25 años se ha acabado y finalmente podremos presenciar la poderosa misa negra, bajo el liderazgo de nada más ni nada menos que King Diamond.
Los daneses, que han sido elogiados por décadas gracias a su sonido único e inspirador para otras bandas y estilos metaleros, al fin arriban a nuestro país para que podamos presenciar en vivo y en directo a uno de los mejores vocalistas de metal del mundo.
Sólo nos queda esperar hasta el 22 de abril y para acortar esa cuenta regresiva, hemos decidido enlistar las que -a nuestro juicio- son las 5 canciones que no pueden faltar en este tan ansiado concierto.
¡Aquí vamos!
- “Evil” – Melissa (1983): decir que esta es una de las mejores canciones del heavy metal de todos los tiempos es casi de perogrullo. Y es que de comienzo a fin, este tema te hace cabecear aunque estés sola(o) en tu pieza. ¿Te pasa? Porque a mí sí. Y es que abre el disco con su atrapante línea melódica, la lírica de Kim Bendix Petersen que -como siempre- es la protagonista, ya que nos introduce en una atmósfera intrigante en la que conocemos la historia de cómo el “Rey Diamante” fue criado en un cementerio rodeado de muerte, para convertirse en un mercenario en las legiones del infierno, amenazando con devorar la mente de su amada cuando ella muera, para posteriormente desenterrarla y amarla infinitamente. De romántico nada, pero -a nuestro haber- esta canción tiene uno de los mejores solos del disco. ¡Un acierto total que sea la primera canción del larga duración!
- “A Dangerous Meeting” – Don’t Break the Oath (1984): este poderoso y pesado single te recuerda por qué es mejor no meterse con lo desconocido, ya que siempre hay algo que podría salir mal, sobre todo si de fuerzas oscuras se trata. Esos riffs pegajosos y hasta hard rockeros encauzan la historia en la que un grupo de personas intentan ponerse en contacto con un espíritu pero quedan en trance contra su voluntad, muriendo en el acto y condenando sus almas al infierno.
- “Melissa” – Melissa (1983): ya que hace sólo unos meses Mercyful Fate lanzó una reedición de este gran primer álbum en honor a su aniversario nº40, no podíamos dejar esta famosa balada fuera. Y es que Bendix es un intérprete que logra transmitirte toda su angustia a través de su voz. Son increíbles 6:41 minutos que te volarán la cabeza a través de su melodía atrapante, los riffs de guitarra, las líneas de batería y la lírica de King Diamond expresando su dolor, arrodillado frente a un altar con la cruz de Satanás en la pared, sintiéndose vacío, ya que su pareja “Melissa” ha muerto o ha sido llevada lejos, y él jura vengarse de sus captores. Todo esto hace que esta canción sea un éxito reconocido popularmente por la mayoría de los fanáticos y los críticos de la música metal.
- “The Oath” – Don’t Break the Oath (1984): el rey de la oscuridad sí que sabe hacer lo suyo y en esta canción queda totalmente demostrado, ya que nos encontramos con un heavy metal tenebroso que se mezcla con importantes líneas progresivas y falsetes agudos, haciéndonos cruzar casi obligadamente hacia lo maligno. Este tema no es sólo uno de los favoritos de los fans de la banda, sino que también, de músicos de black metal que ven en este himno una de sus influencias más puristas.
- “Curse of The Pharaohs” – Melissa (1983): esta canción es un himno de heavy metal al más puro estilo Judas Priest, ¿sí o no?. En este tema, las guitarras lo son todo y eso es indiscutible, ya que dan énfasis y ponen en advertencia al oyente sobre lo que se viene: la “Maldición de los faraones”, historia que nos teletransporta directamente a Egipto para conocer una de sus más antiguas leyendas y nos referimos a la de perturbar el lugar de descanso o tumbas de los faraones, donde no puedes tocar ni robar nada, ya que podrías quedar maldito de por vida. ¡Mejor ni te atrevas a desafiar sus espíritus!
Y como sabemos que hay muchas más canciones que queremos escuchar en este esperado concierto, les compartimos un bonus track que consideramos tampoco puede faltar en esta pasada que tendrán los daneses por nuestro país:
Nos referimos a “Satan’s Fall” – Melissa (1983), el que con una duración de 11 minutos, es un tema que pasa por distintas estaciones musicales, desde el heavy hasta el black metal. Fue escrita por el guitarrista Hank Shermann, y es la segunda canción más larga en la discografía de Mercyful Fate. Es más, Michael Denner dijo que había alrededor de dieciséis riffs diferentes en su contenido compositivo, lo que confirma una vez más el por qué esta banda es una de las mejores en la historia de la música pesada de todos los tiempos.
¿Alguno de estas canciones es parte de tu repertorio favorito de la banda y esperas escucharlo en vivo al igual que nosotros? Si es así, entonces no puedes perderte este concierto que aún cuenta con entradas disponibles a través de Punto Ticket en el siguiente link: https://www.puntoticket.com/mercyful-fate
Produce: The FanLab