Meses han pasado desde el anuncio oficial de Los Tres a fines del 2023 hasta su regreso a suelos capitalinos. La Revu3lta de la banda con sus miembros originales a los escenarios se ubica como uno de los principales eventos musicales del primer semestre de este año, por lo que Rock Legacy no podía faltar para relatar cómo se vivió el show frente a un Movistar Arena a tope.
En total, son 4 las fechas que la emblemática agrupación penquista agendó en el recinto del Parque O’Higgins. Y es que, ni siquiera las dos jornadas de Los Bunkers en el Estadio Nacional, que suceden en paralelo, impidieron que el público agotara las entradas para los días 27, 28 y 30 de abril, y posiblemente la última fijada para el 1 de mayo.
La cita, que inicialmente comenzaba a las 17:30 con la presentación de Torito Alfaro, partió 18 minutos después, en paralelo al comienzo de la entrada del público al recinto. Este hecho perjudicaría los horarios de presentación durante todo el espectáculo, aunque no repercutió ni en los ánimos ni en la calidad de las presentaciones preparadas.
Torito tuvo el desafío de partir frente a un Movistar casi vacío, cosa que no incidió en lo más mínimo en su actitud sobre el escenario, logrando las palmas del público que lentamente aumentaban canción tras canción a medida que se ocupaban los asientos de cancha y platea alta.
Con menciones a Los Chileneros y Violeta Parra, el folclorista invitó a la emblemática figura de la cueca nacional, María Esther Zamora, quien entró al escenario bajo el vitoreo de todos los presentes, con el ánimo que bien la caracteriza, con quien interpretaron las últimas piezas de su parte del show.
Con una propuesta cercana al pop rock y al rock alternativo, Floresalegría, banda formada en 2021 y liderada por Pamela Alegría, se presentó en un domo que ya comenzaba a llenarse de a poco.
El grupo logró convencer a un público que, en promedio, les superaba en edad, presentando canciones como “A Contraluz” o “Un día”, parte de su única producción hasta el momento, el EP “Curá y Sola”. Entre el particular sonido de sus guitarras y el encanto de su vocalista, el recinto ya estaba armado de ánimos para recibir al plato fuerte de esa noche.
A las 20.11, con un público ansioso, pifiando de la impaciencia a raíz de los 30 minutos de retraso según el horario oficial, Los Tres finalmente salieron al escenario
con el éxtasis unánime de los presentes, comenzando con el elegante instrumental “Follaje en el Invernadero”, tal como en su primera presentación en Concepción.
“Sudapara”, “El aval” y “Gato por liebre” (con duelo de guitarras incluido) pasaron rápidamente antes de la primera intervención de Álvaro Henríquez, invitando a los marihuaneros a fumar con su permiso, antes de comenzar con el redoble que abre “Hojas de té”; canción que formó el primer gran karaoke de la noche.
Las primeras notas sobre el reconocible contrabajo de Titae acompañaron a la emblemática “La Torre de Babel”, dando pie a una seguidilla de clásicos que culminaron en la celebrada “Olor a gas”, corte de su emblemático álbum “Fome” (1997). De este mismo lanzamiento, la agrupación revolvió sus roles para comenzar un interesante bloque instrumental con “Claus” y “Largo”, donde vimos a Álvaro en la batería, Pancho Molina en el bajo y a Titae en los teclados.
“Aunque no lo crean, una canción de amor”, así anunciaban a uno de los grandes himnos fogateros que se han creado
alguna vez, “Un amor violento”. Y la misma atmósfera generada por este clásico se mantuvo con una de sus grandes composiciones en su tercer disco, “Moizefala”, cerrando el primer gran bloque de la noche.
El reconocible sonido del jazz huachaca que acompaña a la obra “La Negra Ester” indicaba el comienzo del infaltable homenaje al Tío Roberto “Lalo” Parra. Las enormes pantallas del escenario simularon el ambiente de una peña para presentar a los penquistas presentando las cuecas “El arrepentido”, “La perra con el perro” y “La vida que yo he pasado”, junto a las palmas de todo el público presente, quienes también ayudaron a entonar el foxtrot “Quién es la que viene allí”. Acá se lucieron los solos de Ángel Parra, Titae y Pancho, el más aplaudido por un público agradecido por su regreso a la banda.
Un segundo encore trajo la nostalgia de su primer disco con “Amores incompletos”, “He barrido el sol” y “La primera vez”, tan coreadas como la extensa “La espada y la pared”, indicando el comienzo del término de la jornada.
Luego de un recorrido fotográfico por varios momentos históricos de la banda histórica de los 90’s, los penquistasdecidieron terminar con los riffs más pesados de su discografía junto a “Bolsa de mareo”, “No sabes que desperdicio tengo en el alma” y “Tu cariño se me va”. Así terminaría el primero de cuatro Movistar Arena, mientras sonaba “All Tomorrow’s Parties” de The Velvet Underground por los parlantes, un pequeño guiño a sus más fanáticos, ya que es el bonus track que acompañaba al cover de Buddy Richard al final de su tercer disco, “La Espada y la Pared”.
No hay duda de que la mezcla generacional observada entre la audiencia del lugar es sólo reflejo de lo que Los Tres son capaces de demostrar en vivo, una trayectoria que logró dejar marca en lo más profundo de nuestra cultura e imponerse como uno de los emblemas de la música de nuestro país.
Si las tres jornadas restantes muestran lo mismo observado anoche, entonces es probable que este gran evento sea recordado como uno de los más emblemáticos hechos por una banda nacional durante el 2024, en una Revu3elta sólida y necesaria.