No sólo dolor y padecimiento pueden expresarse a través de la música, ya que también puede ser un vehículo para el crecimiento y sanación. Así lo siente Intensa Bravura, quinteto nacido en Concepción (recientemente nombrada como “Ciudad Creativa” por la UNESCO) y que hace su debut con “Ritual of Witches and Wine“, una canción muy profunda y llena de significado que entrega su primer manifiesto artístico con el que muestran sus credenciales para iniciar su escalada en la música popular.
Escrita por Nahí Azul, voz principal, letrista y compositora del grupo, su inspiración llegó luego de asistir a un encuentro con mujeres que compartieron sus historias de apego a una persona narcisista. “La protagonista muestra la intensidad y romanticismo al que estamos condicionadas y que nos pone en situaciones de vulnerabilidad cuando buscamos amor, pero luego descubre que quien ejerce dinámicas tóxicas en la relación, generalmente no tiene ojos para ver más que su propio dolor y está preso de su propio infierno”, explica.
Desde la profundidad de este relato, toma la batuta el pianista Rodrigo Poblete, director musical del grupo, para que cada acorde se transforme en un paso hacia la curación. “Creemos que la música es un puente que conecta el pasado con el presente, el sueño con la realidad y -a todos nosotros- con nuestras fibras más profundas”, reflexiona el músico. “Intensa Bravura es el grito de aquellos que encontraron en la música el eco de sus historias, el refugio de sus pasiones y la expresión de sus más íntimas bravuras”, complementa Nahí.
La banda está compuesta por Nahí Azul en la voz, Rodrigo Poblete en el piano y dirección musical, Demian Campos en el bajo, Sebastián Torres en batería y Lucho Astudillo en guitarra y voces; connotados músicos de la región del Biobío de Chile que, luego de años de trayectoria, unen sus caminos para ofrecer una nueva experiencia musical a través del lenguaje universal y todopoderoso del rock/blues.