Decessus, banda de death metal formada y liderada por Ignacia Fernández en voz, junto a Jaime Pape (bajo), Carlos Palma (guitarra) y Martín Fenix (batería), tuvo un auspicioso 2024: hicieron su debut en vivo en el emblemático escenario capitalino de Mibar y abrieron dos shows internacionales (Insomnium en Sala Metrónomo y Jinjer en Teatro Caupolicán).
🎤 Y febrero comenzó con todo: el fin de semana pasado fueron parte del Cautín Metal Fest, compartiendo cartel con leyendas como Panzer, y este miércoles 12 de febrero se presentaron en Audiomúsica en un show más íntimo, pensado especialmente para sus más acérrimos fans, del que Rock Legacy tuvo el privilegio de ser testigo.
🔥 Tras una introducción titulada “Awakening”, comenzaron a sacudir las cabezas del casi centenar de personas apostadas en el recinto ubicado en Ñuñoa con “Traitor”, su más reciente sencillo lanzado en diciembre pasado. Esta canción explora la dualidad entre las apariencias y las intenciones ocultas del ser humano, abordando, de manera visceral, la fragilidad de la confianza y la naturaleza corrosiva propia de la traición, y que -musicalmente- tiene elementos propios del metal sinfónico.
💔 Siguieron con otra ya conocida: “My War of Pain”, cuya letra refleja una lucha interna marcada por la traición y el dolor: “I’ve been quietly deceived, tragically perceived, another battle lost in this war of pain”, una constante frustración hacia la falta de empatía: “Your weakened ass mind, lack of empathy, cuts so deep”, y un sentimiento de agotamiento por la batalla interminable: “No, I can’t stay seated while it keeps spreading, you plague.”
🎶El cuarteto prosiguió con dos canciones que aún no han lanzado oficialmente: “Red Abyss”, que ya había sonado en el show de apertura a Jinjer el año pasado, y “Flames”, una canción nueva que formará parte de su próximo lanzamiento, que verá la luz durante este año.
🌍 Antes de “The Eve of Severe Tongues”, que también fue apreciada por quienes presenciaron el show de los ucranianos liderados por Tatiana Shmaylyuk (influencia directa para Ignacia Fernández), sonó “Dying Hope Blossoms”, con una fuerte crítica a la codicia y la indiferencia humana: “Left alone like rotting flesh, your bloody hands have no punishment” / “Selfish advances, pray for their asses, we lose our chances as the world collapses”, la destrucción ambiental: “Trees are burning, the fields are drying, by businessman stealing nature’s water” / “Oceans all poisoned, cetaceans captured, cold-blooded actions under progress name”, y un notorio sentimiento de desesperanza: “We lost our chances, our world collapsed.”
🎸 Luego de un breve break instrumental, la banda, que había abandonado el escenario, volvió al proscenio para un par de machacazos más: la recién estrenada “As I Paint Melancholia” y su primer sencillo, el más reproducido en plataformas y el de mayor duración hasta la fecha: “Deliverance”, cuyo espíritu refleja la lucha por la liberación personal: “I’m begging to you for my deliverance, so long I’ve been sinking in my own head, now I’m no longer my own threat”, la resiliencia frente a la adversidad: “Breaking through old harm and damage, before darkness takes me, remaining resilient in front of adversity”, un claro rechazo a la opresión: “I’m no longer accepting your hypocrisy, your hatred, your forced oppression”, y un sentimiento final de empoderamiento y cambio: “This is the time to change your path, lead yourself to a better tomorrow, a brighter tomorrow.”
🙏 Con agradecimientos y fotos de rigor para sus fans, el cuarteto se despidió habiendo realizado un impecable despliegue en cada uno de los instrumentos, y en esto incluyo, desde luego, a Ignacia Fernández, quien, a fuerza de meticuloso estudio, se ha hecho un nombre en la escena como una de las voces guturales más potentes del país.