El pasado sábado 18 de octubre, Casa de la Música volvió a estremecerse con una celebración histórica. En medio de una noche cargada de distorsión, neblina de amplificadores y un público que no descansó ni un segundo, Yajaira celebró sus 30 años de trayectoria con un show demoledor y envolvente. Además, fueron acompañados por los penquistas The Polvos!, encargados de abrir la jornada con su mezcla de rock con atmósferas lisérgicas y total psicodelia.
En un lugar repleto, con un público ansioso desde temprano, todas las expectativas vislumbraban que la jornada no sería sólo un concierto, sino un ritual eléctrico, una cita obligada a una celebración para quienes crecieron bajo el eco del stoner, el doom y el rock pesado hecho desde la independencia absoluta.
The Polvos! inició la jornada, banda penquista que ha sabido construir un sonido propio dentro del rock denso y psicodélico, con una presentación impecable cargada de groove y oscuridad. Desplegaron un sonido hipnótico que se movía con guitarras entre la psicodelia y el fuzz más espeso.
Luces bajas y visuales estallando en tonos cálidos creaban una atmósfera sonora entre la niebla, donde la batería marcaba el pulso que era más de una experiencia que de un show. Su propuesta penquista mezclaba crudeza con texturas que invitaban a flotar y a viajes mentales, logrando conectar con una audiencia que ya estaba lista para dejarse llevar.
Luego, vino el turno de Yajaira, donde la historia se sintió en cada acorde. Desde el primer riff, la banda demostró por qué se han ganado un lugar esencial dentro del rock pesado chileno. Samuel (Sam) Maquieira, Miguel Ángel (Comegato) Montenegro, miembros fundadores, junto al baterista Rodrigo Millán (Icarus Gasoline/Dead Christine) desataron un repertorio que recorrió su discografía completa, mezclando clásicos con pasajes de trance sonoro y pesado que solo ellos pueden construir.
El público, una mezcla de generaciones, entregó pleitesía a una banda que lo daba todo en el escenario. Hubo momentos de pura comunión al ritmo de bajo y guitarras que parecían invocar tormentas. Todo sonaba denso, pero también profundamente emocional. Yajaira no solo tocó canciones, invocó un viaje colectivo, largos pasajes instrumentales, crescendos que hipnotizaban, silencios que pesaban más que el ruido.
Treinta años no pasan en vano, pero la banda mostró una vitalidad intacta, un pulso firme y un sonido más sólido que nunca, dejando claro que no se trató solo de un aniversario, sino de una celebración del camino, la autogestión y la resistencia sonora.
Luego del show, en Rock Legacy tuvimos la oportunidad de escuchar las impresiones de los protagonistas de la noche acerca de cómo vivieron esta celebración:
Bruno Flores (guitarrista de The Polvos!): “Estamos super contentos de haber tocado en este espacio, que está super bueno, y sobre todo en una fecha tan importante como es celebrando los 30 años de una banda que inicio todo el movimiento. Nos deja super contentos porque fue una buena tocata para nosotros y queremos seguir en la senda.
La próxima semana se nos vienen dos fechas: en Valdivia en “Bar Vivaldi” junto a Brian Dejacker, y el sábado 24 en Pucón, en “La Vieja Escuela”, tocando además con “La Memoria de los Rios”, asi que viene harto movimiento para Los Polvos.
Tenemos otra fecha para cerrar el año, y luego como banda, concentrarnos en el tercer disco, componiendo a full e ir dejando un poco atrás nuestra segunda placa “Floating” que afortunadamente nos trajo muchas satisfacciones a nivel internacional, sellos, giras.
Así que estamos super contentos hoy de estar acá en nuestra casa, Conce, y agradecer a todos los amigos, los rockeros que hacen el aguante en la música, que es un camino difícil, autogestionado siempre, ¡aguante el rock and roll!”.
Miguel “Comegato” Montenegro (bajista de Yajaira): “Nuestra celebración de 30 años acá en Conce es muy especial, porque las primeras veces que salimos de Santiago en los 90’s fue acá, en Concepción, entonces para nosotros es increíble volver. Tenemos hartos amigos y gente que nos viene a apoyar a las fechas, por lo que siempre Conce para nosotros es excelente. No podíamos no venir a celebrar los 30 años, felices de estar acá una vez más y poder celebrar con el público penquista nuestro cumpleaños de 3 décadas de rock pesado”.
¿Cómo ha sido la evolución de la banda en estos años?
“Ha sido increíble este viaje por tanto tiempo. Hemos ido aprovechando y adaptándoos a cada tiempo, cada disco que hemos sacado ha sido el reflejo de momentos de nuestras vidas, de las posibilidades que hemos tenido, de los amigos que nos han ayudado, que han estado alrededor nuestro, porque la verdad es que sin toda la gente que nos apoya, tanto en nuestro equipo técnico, como quienes nos van a ver a los conciertos, que nos compra los discos, todo esto hubiera sido imposible.
En Chile, mantener una banda activa tantos años es realmente una utopía, pero que se puede hacer realidad, así que la constancia en el tiempo y las ganas de tocar son las nos han mantenido para seguir adelante todo este tiempo.
Agradecemos la oportunidad de haber tocado. No solo en los grandes eventos, como cuando tuvimos la suerte de estar con bandas increíbles de nivel mundial como Black Sabath, Metallica, etc, sino también cuando uno viene a las regiones y comparte con bandas del underground que dicen que nuestra música para ellos ha sido súper importante y los ha motivado a hacer música; eso es tanto o más importante, así que más que nada, agradecer por la posibilidad y la suerte de haber seguido adelante tanto tiempo con esta banda”.
¿Y qué se espera para un futuro próximo de Yajaira?
“Seguimos adelante con lo de los 30 años. Todavía tenemos para un rato más, y tratar de seguir creando música y seguir avanzando en ese sentido, expresando nuevas formas musicales”.
En Concepción, la cuna del ruido, Yajaira volvió a recordarnos que el peso no está solo en los amplificadores, sino en la historia que se carga sobre los hombros. Y que hay bandas que no envejecen, sino que se transforman en culto.

