Dentro de los múltiples aspectos que se pueden escoger para hacer un paralelo entre el periodo que conocemos como Edad Media y la actualidad, opté por tomar el ámbito de la música, ya que actualmente hay una gran cantidad de bandas o grupos (especialmente dentro del metal) que cumplen de cierta manera con algunos aspectos de la música medieval. Pero antes de desarrollar ésta, es menester hacer una caracterización general de la Edad Media antes de hacer esta comparación a nuestros días.
La situación previa a la Edad Media consistía en un Imperio Romano cada vez más debilitado, donde había cierto “conflicto” entre las religiones como los judíos, los paganos, los romanos y los cristianos. Finalmente en el siglo V D.C. el emperador Augústulo es derrotado por los ostrogodos y se pone fin al Imperio Romano de Oriente. Ahora bien, en términos cronológicos, la Edad Media dura entre el siglo V y XV D.C. Se inicia con la caída del Imperio Romano de Occidente (específicamente de su capital Roma) y termina con la caída de la parte Oriental (capital conocida como Constantinopla, Nueva Roma o Bizancio), aunque otros teorizan que la Edad Media terminó con el descubrimiento de América en 1492 e incluso autores como Jacuqes le Goff plantean que el periodo terminó a mediados del siglo XIX. Se caracteriza por tener un paradigma muy ligado al cristianismo, donde prácticamente todo lo que se hacía –tanto como las múltiples producciones simbólicas como las acciones de la vida como tales- estaba ligado a ello. Hay que decir que influyó mucho en el desarrollo del cristianismo como “dogma central”, la “cristianización” del emperador Constantino I, quien proclamó esta religión como la central del Imperio (aunque el cristianismo no era la única religión que existía. Existían otras como los judíos o los islamistas).
Ahora, refiriéndonos al arte medieval, eran imágenes “simples”, ya que el mensaje importaba más que lo estético como tal. Pero luego del II Concilio de Nicea, en el año 787 se llegó a una resolución: la distinción entre la “adoración” y la “veneración” de imágenes. En el ámbito arquitectónico, vemos como máximo referente a la Iglesia, además de una serie de símbolos con los cuales está decorada. Hay múltiples ejemplos, como los arcos agudizados (acercamiento a Dios), los vitrales (donde entra la luz divina), los laberintos (que representan la vida en sí misma, donde sólo hay un camino: el camino de Dios), entre otros.
Finalmente, en lo que a nosotros nos convoca, la música medieval, podemos apreciar tres “grandes” distinciones. Primero tenemos el canto gregoriano (Gregorio Magno), donde se cantaban oraciones en las liturgias en las iglesias, en idioma latín, a capella, con obras anónimas (esto era muy recurrente en la Edad Media, ya que importaba más el mensaje que el autor de la producción simbólica) y estructurada por neumas (algo así como las “notas musicales” de aquella época). Luego dimos paso a los juglares, artistas ambulantes que recorrían toda Europa contando historias en lugares públicos o para entretener los banquetes de los nobles y reyes, aunque también se les consideraba paganos por contar historias que estaban “alejadas” del paradigma cristiano y, también, a los trovadores, personas dedicadas a “cantarle al amor”. Y finalmente, tenemos la llamada Polifonía Religiosa Medieval, la cual es una variación al Canto Gregoriano, donde se incorporan más voces y variaciones en las melodías y tonos de las mismas. Se distinguen dos etapas: el Ars Antiqua (S. XII-XIII D.C.) y Ars Nova (S. XIV hasta el Renacimiento).
Luego de todo esto, ¿cómo elementos de la música medieval han influenciado y permitido el surgimiento de bandas de rock y metal? Para responder a esta interrogante recurriremos a múltiples grupos y bandas donde analizando alguno de sus elementos nos permitirán comprender la trascendencia que “lo medieval” tiene en la actualidad.
Aunque podemos ver la influencia de la Edad Media en muchos géneros del rock y metal, donde más predominan dicha influencia es en el power y folk metal. El primero, subgénero del heavy metal en los que predominan baterías con doble bombo en gran parte de sus canciones, velocidad de ejecución de muchos instrumentos, voces agudas (con registros de voces desde tenores hasta sopranos, con lo que no es difícil muchas veces encontrar vocalistas femeninas en estos géneros), coros compuestos de numerosas voces y con el uso frecuente de escalas. Bandas como Blind Guardian, Gamma Ray, Helloween, Rhapsody of Fire, Sonata Arctica, Stratovarius, Mägo de Oz y Epica, entre muchos otros, pertenecen a este subgénero.
De aquí podemos tomar como ejemplo a Rhapsody of Fire. Los italianos se caracterizan por contar con voces operáticas similares al canto gregoriano e incluso algunos extractos de sus canciones están escritos en latín. Canciones como “Ira Tenax” o “In Tenebris” son claros ejemplos de ello. Ahora bien, analizando sus letras nos encontramos con parajes fantásticos, con luchas de caballeros contra dragones, reyes y magos en grandes reinos, en fin, lo que uno piensa cuando escucha la palabra “Edad Media”. Ahora bien, un detalle que no se nos puede escapar es que en el medievo todo estaba orientado hacia Dios y Rhapsody of Fire nos cuenta a través de diez discos una larga e interesante historia (compuesta por el ex guitarrista de la banda, Luca Turilli): Se trata de la “Saga de la Espada Esmeralda” –o también llamada las “Crónicas de Algalord”- que comprende 5 discos y su secuela “El Secreto Oscuro”. En esta ocasión, nos enfocaremos en la primera.
El personaje principal es el Guerrero de Hielo (también llamado El Elegido) quien busca la Espada Esmeralda para derrotar al malvado Akron (Señor Oscuro). Para ello deberá buscar las Tres Llaves de la Sabiduría para encontrar dicha espada (Legendary Tales). Luego se interna en la travesía y pelea con el dragón Tharos, con quien después une fuerzas, reúnen las llaves y llegan donde estaba la Espada Esmeralda. El guerrero consigue el objetivo, pero el guardián de la espada mata a Tharos y, lleno de venganza, el Guerrero de Hielo jura vengarse de Akron y matarlo como sea (Symphony of Enchanted Lands). Con la espada en su poder, Akron le pide que le entregue la espada y el Elegido accede, siendo capturado junto a la princesa Airin y el príncipe Arwald. Los príncipes son asesinados por el Señor Oscuro y el Elegido logra escapar y vuelve a Algalord a relatar que Akron posee la Espada Esmeralda (Dawn of Victory). Akron comienza a destruir todo a su paso, donde una lluvia de fuego cae sobre el Ejército de Hielo, resucitan a la Reina de los Horizontes Oscuros y destruyen los pueblos de Elnor y Thorald (Rain of a Thousand Flames). Finalmente comienza la del Ejército de Hielo contra la Reina de los Horizontes Oscuros y las fuerzas de Akron. El Elegido derrota y manda a Akron y a sus demonios al Infierno, donde fueron custodiados por las Gárgolas (Power of the Dragonflame).
Ahora bien, al adentrarse en esta historia podemos ver cómo está influenciada por la Edad Media. Porque tal como lo planteaba el paradigma cristiano dentro de las producciones simbólicas, el bien debe vencer al mal, aunque no es tan riguroso como podemos observar. En este caso, el Guerrero de Hielo (representando al bien), luego de una larga travesía logra derrotar a Akron (el Señor Oscuro, el diablo), la idea de un héroe que vence el mal y trae la paz al mundo. Para ello debe buscar las Tres Llaves de la Sabiduría para obtener la Espada Esmeralda. Aquí tenemos un “punto de comparación”, porque no es una “espada simbólica”. Si analizamos la épica germana Beowulf, el personaje principal pelea sin armas, ya que Dios lo protege. Aquí la noción del “Dios protector” no existe, pero no quiere decir que no exista en el relato. Además, en la obra de Rhapsody of Fire el Elegido pelea contra el dragón Tharos y luego se hace aliado de este y pelean juntos contra Akron. En cambio, en Beowulf, cuando éste es viejo pelea contra el dragón pero nunca trata de aliarse con él, ya que en la cosmovisión medieval, el dragón es una manera de representar al diablo. Aquí ya se observa que la idea al componer canciones que tienen como base preceptos medievales no están rigurosamente ligadas al cristianismo y es un tópico recurrente en las bandas de metal de la actualidad. Quizás porque los compositores no creen en Dios, quizás porque componer sobre religión les parezca aburrido, son algunas variables que podríamos suponer.
Escucha acá la “Saga de la Espada Esmeralda“:
Escucha acá la Saga “El Secreto Oscuro“:
Referencias y bibliografía:
- Eco, Umberto. (1997): Arte y belleza en la estética medieval. España: Editorial España.
- Hoppin, Richard. (2004): La música medieval. Estados Unidos: Ediciones Akal, S.A.
- Gómez García, Manuel. (1997). Diccionario del teatro. Madrid, Ediciones Akal, S.A.
- Rodríguez, Pablo. Regreso al pasado: Legado Medieval – Un proyecto de relación entre el Heavy Metal y la Edad Media. Recuperado de https://www.academia.edu/7009437/Proyecto_de_relaci%C3%B3n_entre_el_Heavy_Metal_y_la_Edad_Media
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- Robert Rhein, Michael. (2007). Medievales, pero metaleros | Entrevistador: David Ponce | Emol.com. Santiago, Chile. Recuperado de: http://www.emol.com/noticias/magazine/2007/02/01/270446/medievales-pero-metaleros.html