El debut de Spiritualized es una maravilla de esas que es difícil creer que ocurrió, dada la seguidilla de eventos ocurrida durante la implosión del grupo Spacemen 3, Jason Pierce decide dar un salto de fé y graba esta pieza de arte que da sus tributos a la psicodelia espacial de los 70, la muralla de sonido de los 60 de Phil Spector, al ruido y a la repetición, todo mientras se establecía en una escena que estaba a punto de cambiar por el dominio del britpop en Inglaterra.
A principios de los 90, luego de diferencias creativas, discusiones en el estudio y durante giras, llevó a la separación de Spacemen 3, grupo formado y liderado por Peter Kember y Jason Pierce, quienes básicamente crearon el space-rock revival. Y es aquí donde tomamos el lado de Jason Pierce, quién siempre tuvo una afinidad por grupos como The Velvet Underground y The Stooges, y géneros como el gospel y el blues estadounidense, influencias que llevó a su banda con Kember. Cuando llegó la hora de grabar material para su nuevo proyecto, Pierce toma el rol de frontman y multi-instrumentista, además de llevarse de su grupo anterior al guitarrista Mark Refoy, el bajista Will Carruthers, y al baterista Jonny Mattock. Poco después, la pareja de Pierce en aquella época, Kate Ridley, se sumaría en teclas, completando la formación del proyecto. El único material previo al disco es el single “Anyway That You Want Me” del grupo británico The Troggs, cuya interpretación ya en sí muestra la dirección a la que se dirigían como grupo, melodías suaves hundidas en reverb, ecos y repetición hasta el punto de hipnosis.
El space-rock revival toma los sonidos espaciales de bandas que surgieron a finales de los 70, grupos como Pink Floyd con Syd Barret, Hawkwind, UFO, Gong, pero se acerca de forma mucho más minimalista y deja que la simpleza tome el control, los efectos y texturas toman más protagonismo que los riffs, y el primer proyecto de la banda sigue esta corriente como su biblia, teniendo un rock clásico salido de los 60 como la base tomando el sonido de grupos como The Rolling Stones, The Animals, Velvet Underground entre otros y lo nutren de los 30 años de música que han pasado desde ese entonces entonces, mezclando krautrock, dream pop, shoegaze y neo-psicodelia, todo esto creado con la muralla de sonido, técnica de producción donde cada instrumento está posicionado en la mezcla de tal forma que causa esta sensación de grandeza. Por otro lado, están las composiciones como tal, que tienen un acercamiento minimalista donde domina la repetición y la disciplina, creando un estado hipnótico y sereno hasta que las canciones llegan a su punto cúlmine y explotan llevándonos al mismísimo espacio exterior.
Obviamente el sonido de la banda fue comparado con grupos de la escena shoegaze en canciones como “You Know It’s True”, “Smiles”, “Step Into The Breeze” , “Angel Sigh” y “200 Bars” que son fácilmente comparables a los trabajos de My Bloody Valentine, Slowdive y Ride, pero las influencias de Spiritualized van más allá de sus contemporáneos, mostrando lados que llegan hasta las rockeras “If I Were With Her Now”, “I Want You”, “Run” y “Shine a Light”, y las serenas, casi ambient, “Take Your Time”, “Symphony Space” y “Sway”. Cabe destacar que “Run” utiliza el verso de una canción de blues de J.J Cale titulada “Call Me The Breeze”, mostrando el largo recorrido de influencias de Spiritualized.
El punto cúlmine del disco llega con “Shine a Light”, una canción de 7 minutos donde la banda muestra todo lo que predican a nivel estético y compositivo y lo llevan al extremo, sacando provecho del melodías simples, repetición, que va escalando e incorporando nuevos sonidos como el saxofón que aparece en distintos puntos y la batería que va cambiando su intensidad a través de la canción, todo para llegar a la explosión de ruido que llega a los 4 minutos y 40 segundos, que se asemeja a la energía dentro de un tema de The Stooges pero controlado por la base constante que lleva la banda durante su duración, hasta volver a caer a los suaves sintetizadores de Kate Ridley, cerrando la canción suavemente.
Lazer Guided Melodies es el inicio de uno de los actos más emocionantes salidos de Inglaterra, resaltando del pasado de Jason Pierce en Spacemen 3, de la escena shoegaze, del dream pop y del naciente movimiento del brit-pop, creando un camino propio y cultivando una fanaticada de culto alrededor del mundo con su sonido espacial, que reinterpreta los clásicos del rock con sonidos modernos, etéreos y, por sobre todo, espaciales. Con el paso del tiempo, Spiritualized fue creciendo en popularidad y en la crítica, sobretodo con su tercer disco “Ladies and gentlemen we are floating on space” de 1997, hasta el día de hoy su disco más popular y que suele quitarle importancia al resto de la discografía de la banda, pero eso no le quita el mérito a un LP debutante con tanta identidad y coraje como Lazer Guided Melodies.
Acá te dejamos links de Youtube y de Spotify para que escuches el disco: