En marzo de 1994, Stone Temple Pilots volvió al estudio para trabajar en su segundo álbum. El desafío no era menor: su debut Core (1992) había vendido más de ocho millones de copias y les había valido un premio Grammy. Pero el cuarteto californiano —Scott Weiland, Dean DeLeo, Robert DeLeo y Eric Kretz— no se dejó intimidar por las expectativas. Junto al productor Brendan O’Brien, registraron el nuevo material en menos de un mes, mayoritariamente en Atlanta.

El resultado fue Purple, lanzado el 7 de junio de 1994. Desde el primer día quedó claro que no era un disco más: debutó en el número uno del ranking Billboard y terminaría vendiendo más de seis millones de copias. STP no solo sorteó la “maldición del segundo álbum”, sino que se consolidó como una de las bandas más representativas de su generación.

De “comerciales” a leyendas

Al inicio de su carrera, Stone Temple Pilots fue duramente criticado, especialmente por los puristas del grunge. Muchos los veían como una banda que intentaba capitalizar el auge del grunge sin ser parte auténtica del movimiento, lo que les valió la etiqueta de “comerciales”. Su sonido más pulido y accesible, comparado con el de bandas como Nirvana o Pearl Jam, llevó a algunos a acusarlos de buscar el éxito rápido en lugar de experimentar genuinamente con el estilo.

Además, la prensa no tardó en compararlos con los íconos del grunge, lo que les valió ser etiquetados como “imitadores”. Especialmente la figura de Scott Weiland fue blanco de críticas, ya que su estilo vocal y actitud fueron considerados por muchos como una copia de Kurt Cobain, lo que añadió presión a la banda para demostrar su autenticidad.

El primer adelanto y el éxito inesperado

El primer adelanto del disco fue “Big Empty”, estrenado en 1993 durante la sesión acústica para MTV Unplugged. La canción fue incluida en la banda sonora de The Crow, la película protagonizada por Brandon Lee, que también alcanzó el primer lugar en las listas de ventas. Apenas unas semanas más tarde, Purple seguiría ese mismo camino y se posicionó en la cima de las listas, siendo el primer álbum de la banda en lograrlo.

El álbum incluye algunas de las mayores canciones de STP, como “Interstate Love Song” y “Vasoline”, ambas números uno en el ranking Mainstream Rock. A diferencia de su antecesor, que estaba más anclado al grunge, Purple mostró una banda más abierta a otros géneros: rock psicodélico en “Lounge Fly” y “Silvergun Superman”, tintes country en “Interstate Love Song” y un toque de blues rock en “Big Empty”.

Uno de los guiños para los fans más atentos está en la línea “She said she’d be my woman, she said she’d be my man”, que aparece tanto en “Lounge Fly” como en “Spanish Flies”, una canción del demo Mighty Joe Young. En ese mismo tema, el solo final de guitarra fue grabado por Paul Leary, guitarrista de Butthole Surfers.

El disco, además, está envuelto en una estética particular: su portada muestra a un niño montado en un dragón volador y no incluye el título Purple por ninguna parte. En su lugar, aparece un kanji chino (紫) que significa “púrpura”, lo que refuerza la vibra psicodélica y onírica del álbum.

A treinta años de su lanzamiento, Purple sigue siendo uno de los momentos más altos en la discografía de Stone Temple Pilots, y un testimonio de su capacidad para evolucionar sin perder el filo.

Stone Temple Pilots regresa a Chile este 20 de mayo para presentarse en el Movistar Arena, mismo lugar en el que debutó en diciembre de 2010, esta vez en el contexto de los 30 años del lanzamiento de Purple. Puedes adquirir tus entradas a través de sistema PuntoTicket aquí.

Banda invitada: Mandrácula

Produce: The Fan Lab

Por Eduardo Soto González

Profesor de Inglés de profesión, cronista musical por vocación.

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