Dark Angel es un plato que vale la pena repetirse una y otra vez. Con motivo de su próxima visita a Chile dentro del Metal Beer Fest volumen II, quisimos hacerte una breve reseña e invitarte a conocer sus cinco tracks más afamados, cuyas letras nos sumergen en las profundidades más sórdidas de la mente humana y su visión del futuro.

Dark Angel es una banda estadounidense de thrash metal, formada en Los Ángeles, California, en 1981. Para la prensa especializada, los californianos son considerados una de las bandas más extremas e influyentes del género, famosos por la rapidez, agresividad y composiciones técnicas que los llevó a ser apodados “los reyes de la velocidad”, destacándose por sus oscuros e  intensos riffs y una batería demoledora y que -con una corta discografía- supo inscribirse en la historia de una tribu que hasta el día de hoy consigue emocionar tanto a jóvenes como a metaleros de la vieja guardia.

Liderada desde su época más emblemática por el baterista Gene Hoglan y manteniendo sólo a uno de sus guitarristas clásicos, Eric Meyer, Dark Angel alcanzó su cúspide con el álbum “Darkness Descends” (1986), considerado uno de los discos más agresivos e importantes del thrash metal, al nivel de obras como “Reign in Blood” de Slayer. Su sonido extremo y despiadado influyó en el desarrollo, nacimiento y evolución  del death metal y el thrash más “técnico”.

A pesar de no haber alcanzado el éxito comercial de otras bandas del género, Dark Angel se ganó un estatus de culto entre los fanáticos del metal más agresivo. Después de varias separaciones y reuniones, la banda sigue activa y continúa siendo una referencia en la escena del thrash y el parche con su nombre es característico en la chaqueta de mezclilla de cualquier metalero que se auto denomine “tru”.

Las 5 mejores canciones de Dark Angel

“Darkness Descends” (1986): un himno del thrash extremo dedicado al fin del mundo, con velocidad brutal y riffs demoledores. La canción describe un escenario apocalíptico donde la oscuridad consume la Tierra. Hace referencia a fuerzas malvadas que traen la muerte y desesperación, con una atmósfera de fatalidad inminente.

“Merciless Death” (1985): un clásico de su primer álbum, una oda a la violencia y brutalidad de la muerte, con un sonido crudo y agresivo que marcó su estilo. Es una de las canciones más crudas de Dark Angel, narrando la muerte de manera implacable y sin piedad. Habla sobre la carnicería y el sufrimiento, con una visión nihilista donde la muerte es una fuerza incontrolable que devora todo a su paso.

“Perish in Flames” (1986): un cierre apocalíptico para “Darkness Descends”, que habla de los horrores de un mundo nuclear, lleno de furia y violencia sonora. La canción pinta un escenario post-apocalíptico donde el mundo es reducido a cenizas. Habla del miedo a la aniquilación total, con referencias a explosiones nucleares y la humanidad pereciendo en llamas. Es una crítica implícita a la destrucción que el hombre puede provocar sobre sí mismo.

“Time Does Not Heal” (1991): un tema técnico y progresivo que muestra la evolución de la banda hacia un thrash más complejo. A diferencia de sus temas más brutales y apocalípticos, esta canción se enfoca en el sufrimiento mental y la idea de que el tiempo no cura todas las heridas. Habla de traumas profundos que persisten, abordando temas como el abuso, el dolor emocional y la lucha interna. Es una canción más introspectiva dentro de su discografía.

“The Burning of Sodom” (1986): una parábola bíblica de la destrucción. Probablemente la canción más rápida de la banda, con una batería implacable y riffs despiadados. Basada en la historia bíblica de la destrucción de Sodoma y Gomorra, la canción describe la furia de Dios cayendo sobre la humanidad pecadora. Su letra es intensa y gráfica, mostrando imágenes de ciudades en llamas, muerte y sufrimiento. Es una metáfora de la brutalidad del juicio y la condena total.

Dark Angel sigue siendo una de las bandas más brutales y respetadas del thrash metal, manteniendo su legado de intensidad y ferocidad. Por esta razón, no te puedes perder este 23 de marzo en Hipódromo Chile la nueva edición del Metal Beer Fest volumen II que además contará con los clásicos Sodom, los clásicos del metalcore Atreyu y los nacionales Sadism, Dezaztre Natural y Decessus.

Entradas ingresando aqu

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Este sitio esta protegido por reCAPTCHA y la Política de privacidad y los Términos del servicio de Google se aplican.